A mayor tiempo en casa, mayor riesgo
El hecho de pasar más tiempo en casa hace todavía más importante que esta sea un lugar seguro para todos los miembros de la familia, especialmente los mayores. Para evitar que sufran accidentes domésticos, lo primero que debemos conocer son los riesgos. Te contamos las causas más comunes de accidentes que se pueden producir en el hogar y cómo los puedes prevenir:
Ver bien evita caídas y sorpresas
- Ilumina bien todo el espacio, especialmente la recámara y el baño.
- Asegúrate de que lo interruptores están a tu alcance y ponles un color que ayude a encontrarlos fácilmente.
- Deja una “luz piloto” encendida por la noche en estancias y pasillos para ver mejor.
Atención a las puertas
- En caso de tener cierre de seguridad, las puertas deben poder abrirse desde el exterior. Compruébalo y mídelas; deben tener un ancho mínimo de 80 cm.
Ventanas traicioneras
- Para evitar los accidentes producidos cuando una ventana se abre hacia adentro, es preferible que las ventanas sean corredizas.
Evita tropezones
- No tengas muebles que entorpezcan el paso, sobre todo en las zonas más utilizadas, como la cocina y el baño.
- Los tapetes y las alfombras pueden provocar tropiezos o resbalones. Es mejor no ponerlos.
- Los sillones y las sillas deben tener descansabrazos y respaldo.
Caídas en el baño
- Tanto el suelo del baño, como el piso de la regadera o la tina deben ser antiderrapantes. Se recomienda el uso de la regadera. Es más seguro.
- Coloca barras de apoyo en la regadera, lavabo e inodoro.
Sentarse en la cama, un reto
- La altura de la cama debe ser la adecuada para facilitar su acceso.
- La distribución de muebles debe permitir movilidad incluso con andadera, bastón o muleta.
Peligro en la cocina
- Para las personas mayores la distribución de los muebles en forma de L es la mejor, ya que les facilita tener un punto de apoyo durante los desplazamientos.
- Los utensilios deben estar al alcance de la mano.
- Es recomendable tener detectores de humo y de escapes de gas.
El botiquín, siempre a punto
Comprueba que tienes todo lo necesario en tu botiquín, lo que no puede faltar son gasas estériles, vendas, curitas, algodón, guantes estériles, agua oxigenada y otros desinfectantes.
También es recomendable que esté surtido con medicamentos: analgésicos, suero oral, crema para las picaduras de insectos y quemaduras, así como suero, tijeras, linterna y termómetro.
Mantén el botiquín en condiciones óptimas, en un ambiente fresco y seco, comprueba periódicamente la fecha de caducidad de los medicamentos y materiales y repón todo lo que se vaya gastando.
Toma medidas y cuídate. En estos días tu bienestar es más importante que nunca.